Txetx: «El cambio climático condicionará la forma de vida en el 2040»
Entrevista realizada por Idoia Eraso y publicada en Gara
Co-creador del movimiento altermundialista Bizi!, del que surgió Alternatiba. Tras décadas como militante, ha participado en la creación de diferentes movimientos e iniciativas de Ipar Euskal Herria, como la moneda Eusko, el movimiento Demo y el festival Euskal Herria Zuzenean.
¿Qué es Alternatiba?
Alternatiba fue creado por Bizi!, que es un movimiento de Iparralde que trabaja sobre la urgencia y la justicia climática. Empezó en el 2013 para tratar de poner esta cuestión en el centro de la movilización y el debate. La idea no es hablar del cambio climático desde el prisma del problema, sino desde el prisma de las soluciones, es decir, abordar lo que podemos hacer para disminuir la emanación de gases de efectos invernadero.
La organización de Alternatiben Herria de Bilbo es interesante porque es principalmente un movimiento sindical que se inmiscuye en el movimiento climático
Las alternativas existen en todos los niveles: la agricultura campesina, el aislamiento de las viviendas, las energías renovables, la reutilización de los productos… Estos métodos no solo nos permiten reducir las emanaciones de gases, sino también crear empleo, una sociedad colectiva y generosa.
¿Qué acciones han organizado para difundir su mensaje?
Para ilustrar el concepto de Alternatiba, creamos un poblado que ponía en contacto a todos los actores que aportan alternativas en un territorio para participar en la batalla global a favor del clima.
La primera Alternatiba tuvo lugar en Baiona el 6 de octubre del 2013. Para cerrar la jornada asistimos a un discurso de Christiane Hessel, la viuda de Stéphane Hessel, que había aceptado apadrinar el proceso de Alternatiba. Hizo un llamamiento para crear poblados Alternatiba en todas partes.
En menos de dos años se han organizado o están en proceso 111 poblados en toda Francia y en varios países de Europa como Inglaterra, Alemania, Suiza, Austria o Bélgica. En Euskal Herria se celebrarán dos en las próximas semanas, concretamente en Donibane Lohizune y en Bilbo. Es una dinámica importante, porque todo eso representa miles y miles de voluntarios, 300.000 personas han participado en un poblado o en el Tour [Alternatiba].
¿Con qué objetivo se creó el Tour Alternatiba?
La coordinación de las Alternatibas se convierte en una fuerza de movilización, y desde ahí se puso en marcha el Tour Alternatiba. La vuelta salió simbólicamente desde Baiona, que acogió el primer poblado, y llegará a París, donde tendrá lugar la COP21. La coordinación europea de Alternatibas está preparando las movilizaciones de cara al COP21, entre ellas un poblado mundial de alternativas, varias movilizaciones de gran envergadura junto con otras organizaciones en el seno de la Coalición Clima 21.
Esta movilización permanente es algo extraordinario. En cada pueblo o ciudad todos los mediodías y todas las noches hay acciones. A menudo, incluso en los pueblos más pequeños hay stands, encuentros con asociaciones y cargos electos locales; hasta ahora hemos estado con miles de ellos
Las movilizaciones son principalmente una gran manifestación el domingo 29 de noviembre, acciones multitudinarias el sábado 12 de diciembre, una cumbre ciudadana y un poblado de alternativas el 5 y 6 de diciembre, respectivamente.
¿Qué experiencias han vivido durante el Tour desde que salió de Baiona?
Esta movilización permanente es algo extraordinario. En cada pueblo o ciudad todos los mediodías y todas las noches hay acciones. A menudo, incluso en los pueblos más pequeños hay stands, encuentros con asociaciones y cargos electos locales; hasta ahora hemos estado con miles de ellos. Ha habido más de 100 conferencias y 150 manifestaciones en bicicleta.
Muchos alcaldes y electos han firmado el “Pacto de transición” que les proponemos, con en el que se les invita tomar medidas sobre el transporte, los residuos, el urbanismo… Alternatiba se trata de una iniciativa vasca que se ha propagado ampliamente.
Hemos pasado por muchos lugares donde la gente lucha contra proyectos nefastos contra el clima, el medio ambiente y el ámbito social.
También ha habido varios incidentes.
COP21 va a tener una importancia excepcional, porque estarán todos los jefes de Estado del mundo y hay que evitar atravesar el umbral tras el cual el cambio climático se autoalimenta y se convierte en un fenómeno incontrolable e irreversible para la humanidad
Los incidentes han hecho que se haya hablado de nosotros. En Marsella el alcalde no dio permiso para que el Tour pasase, pero junto con los marselleses se decidió pasar de todas formas y el alcalde no se atrevió a oponerse, así que, finalmente, nos hizo mucha publicidad.
Otro incidente sucedió cerca de la frontera alemana, en Fessenheim. Hay una central nuclear antigua que el presidente Hollande había prometido cerrar durante la campaña. Como no ha cumplido su promesa, nos detuvimos frente a ella para denunciarlo. Después de aquello la Gendarmería bloqueó el Tour y quiso controlar nuestros papeles para ficharnos, pero nos negamos. De allí nos dirigimos a nuestra siguiente etapa, una granja cooperativa en Alemania. También vino la policía y supimos entonces que Francia había pedido al fiscal de Friburgo que parase el Tour para controlar nuestra documentación.
Desde entonces no ha habido problemas, parece que han comprendido que estábamos decididos y que no se puede aceptar parar a militantes que luchan contra el cambio climático el año del COP21.
¿Qué lectura hace Alternatiba de la COP21?
Va a tener una importancia excepcional, porque estarán todos los jefes de Estado del mundo y hay que evitar atravesar el umbral tras el cual el cambio climático se autoalimenta y se convierte en un fenómeno incontrolable e irreversible para la humanidad.
Se han necesitado tres años para preparar la cumbre. Por lo que sabemos esta cita no logrará un acuerdo que permita estabilizar el clima, sino lo contrario. Digo esto por cuatro razones principales.
La primera es la metodología, es decir los compromisos para reducir la emisión de gases de efecto invernadero, que son voluntarios. Hay un cambio de metodología respecto al Protocolo de Kyoto, donde cada uno debía respetar su compromiso. Ahora se ha decidido que cada Estado fijará sus compromisos, y los adoptados, a día de hoy, son insuficientes para garantizar que no se supere un calentamiento de dos grados de aquí al 2100. La tendencia nos indica que la temperatura aumentará entre tres y cuatro grados durante ese tiempo.
El segundo punto es muy grave, ya que no será jurídicamente obligatorio establecer sanciones si los compromisos de los Estados no se respetan.
La gente se tiene que preparar para que podamos construir un movimiento por el clima que consiga ganar batallas decisivas en los próximos cinco años
El tercer punto es crucial, porque el acuerdo no se aplicará hasta el 2020. Pero algunos climatólogos dicen que si no actuamos de manera contundente antes de ese plazo, no podremos evitar una trayectoria de más de tres grados, lo que supone una catástrofe.
Y la cuarta gran razón es que esas negociaciones dejan de lado algunas cuestiones centrales, principalmente la extracción de los recursos de las energías fósiles. Si queremos que la temperatura no suba más de dos grados, tenemos que dejar bajo el suelo dos tercios de las energías fósiles conocidas actualmente. Si extraemos y consumimos todas las energías fósiles, estaremos cerca de un aumento de nueve grados.
Tampoco se mencionan los pactos transatlánticos como el TAFTA o TTIP, que están desregulando la economía internacional, ni de reforzar la deslocalización, factores responsables del calentamiento climático.
¿Qué se puede hacer para cambiar esta realidad?
Es muy importante que la población sea consciente de que corremos hacia una catástrofe mundial, y que la COP21 no va a resolver el problema central. Va a condicionar la forma de vida en el mundo ya en el 2040.
La gente se tiene que preparar para que podamos construir un movimiento por el clima que consiga ganar batallas decisivas en los próximos cinco años. Cómo hacer desaparecer las subvenciones a las energías fósiles, porque hay que informar sobre ello: hoy en día se subvenciona por centenas de millones de dólares la extracción de energías fósiles.
Las movilizaciones históricas son necesarias en el momento en que se celebre el COP21 para lograr activar un movimiento que pueda ganar estas batallas. Por lo tanto, está en juego la construcción de un movimiento popular internacional, y en eso trabaja a día de hoy Alternatiba, no solo en Europa, sino también en sus relaciones con las redes internacionales que llevan el mismo combate en otros continentes.
«Garazi y Bilbo acogerán en octubre el cuarto y quinto Alternatiba de Euskal Herria»
En Donibane Garazi y en Bilbo se van a organizar poblados Alternatiba.
Sí, serán el cuarto y quinto Alternatiba de Euskal Herria. El primero, que puso en marcha todo este movimiento, se celebró en Baiona en el 2013. Después hubo otro en Zokoa, en Ziburu, el año pasado. En junio uno pequeño en Donostia, lo llamaron Alternatiba Txiki, pero logró reunir a miles de personas.
En Garazi se celebrará el 10 y el 11 de octubre. El sábado habrá un fórum para explicar a la gente qué es el cambio climático, qué está en juego y cuales son los plazos. Para ello habrá varias personalidades que vendrán durante todo el día. El domingo se celebrará en toda la localidad un poblado sobre el cambio climático con muchos espacios diferentes.
La de Bilbo es una Alternatiba importante, se está montando para el 24 de octubre, y está organizada por la Carta Social, la plataforma que reagrupa los sindicatos mayoritarios y diferentes movimientos sociales y ecologistas de Hego Euskal Herria. Presentarán no solo las alternativas al cambio climático, sino que tratarán de demostrar que se puede solucionar también la crisis social, económica, democrática y la cuestión de la soberanía de Euskal Herria.
¿La de Bilbo aporta una nueva visión?
Esta organización es interesante porque es principalmente un movimiento sindical que se inmiscuye en el movimiento climático. Tal y como mencionaba una representante del Movimiento Sindical Internacional en una reunión reciente, los trabajadores tienen mucho interés en informarse sobre la COP21, porque cuando no están alrededor de la mesa de una negociación tan decisiva como esta, están en el menú.
Los trabajadores y todos los estratos de la sociedad tienen interés en estar en primera línea de este combate, porque va a condicionar muchas cosas decisivas en los años próximos. Tiene que plantearse desde la perspectiva que defienda los intereses de las personas más vulnerables, no de quienes son ricos y están protegidos y en el poder.