Por una salida justa. Propuesta política de ELA.
La crisis global creada por el Covid-19 supone un shock sin precedentes en la historia. La economía, y el sistema capitalista en el que se enmarca, estaban ya en crisis (económica, social, ecológica, humanitaria, patriarca…). El coronavirus y su expansión ha sido el detonador, no la causa de esa crisis, pero es obvio que las graves consecuencias sanitarias de la pandemia, las drásticas medidas aplicadas hasta ahora (confi namiento, cierre de empresas, etc.), así como la incertidumbre generada, están teniendo ya importantes consecuencias en el empleo, en el bienestar social y en la economía. Las medidas que se adopten desde el principio van a marcar la orientación de salida que se va a dar a esta crisis. Es por eso que la clase trabajadora y el conjunto de la sociedad deben tener claro que para incidir en esa orientación debemos mirar a corto, a medio y a largo plazo.
Como explicaba Naomi Klein en su libro “La doctrina del shock”, el poder económico ha utilizado los shocks que han venido en forma de desastres naturales, guerras, crisis o golpes de estado para aplicar reformas impopulares que en otra situación no se podrían aplicar debido a la resistencia de la población. La crisis del coronavirus se asemeja a esos shocks que describe la autora. La pandemia ha originado caos e inseguridad en la psicología social, y el miedo que se ha originado es un componente que en estos shocks tiende a que la población actúe con un seguimiento incondicional a quien dirija la lucha contra ese enemigo común. Debemos ser conscientes de que, más allá del coronavirus, existen derechos y libertades democráticas, individuales y colectivas que no podemos sacrifi car y por los que deberemos luchar.
Por ello, ante el shock que produce la situación actual la población debe estar preparada para que no se repita lo que ocurrió en la crisis del 2008: la imposición de la austeridad por parte de la Troika, que golpeó durante toda una década a la clase trabajadora y las privatizaciones y recortes en el sector público, como la sanidad pública.
Dividimos el documento en tres partes: en la primera abordamos el marco de la crisis (a través de una explicación de la dinámica del sistema capitalista global, para analizar lo sucedido tras la crisis de 2008 y cómo estábamos antes del coronavirus); en la segunda analizamos la respuesta que se está dando a la crisis del Covid-19, para ver si se va o no en la misma dirección que tras el estallido fi nanciero de 2008; en la tercera extraemos consecuencias de todo lo dicho anteriormente, y marcamos las líneas de salida para dar una respuesta social, ecológica, feminista y democrática.