Radiografía del sistema perverso de la deuda
Maria Lucia Fattorelli, Coordinadora de la Auditoria Ciudadana de la Deuda en Brasil desde 2001 (este artículo se publicó en latindadd.org 2012/09/30)
Conferencia: 2 de marzo a las 9:30 en Bilbo, Auditorio Jesuitas de Indautxu. Para ver el programa clickar aquí
Los recursos mundiales disponibles son más que suficientes para que todos los habitantes del planeta tengan vida digna y abundante. Sin embargo, históricamente la injusticia social y la explotación han sido impuestas a la mayoría de los habitantes del Hemisferio Sur. Hace décadas identificamos que uno de los principales fenómenos que ha provocado esa situación inaceptable es el proceso de endeudamiento público, resultado de operaciones meramente financieras, sin contrapartida en bienes o servicios para aquellos que son obligados a soportar su carga, o sea, para aquellos que pagan elevados tributos y no reciben servicios públicos adecuados.
"Por medio de la Auditoría de la deuda, es posible conocer la naturaleza de la misma, su origen, factores que influenciaron en su crecimiento, quién se benefició del proceso y dónde fueron aplicados los recursos, identificando deudas ilegítimas o ilegales"
Desde el 2008, países del Hemisferio Norte también pasaron a ser víctimas del proceso de endeudamiento público sin contrapartida a las naciones, pues la mayoría de ellas se endeudó pesadamente sólo para transferir recursos al sector financiero.
Frente a ese panorama, se pone de manifiesto la necesidad de investigar los procesos de endeudamiento que han provocado tanta injusticia social en todo el mundo, beneficiando únicamente a una minoría localizada principalmente en el sector financiero.
Auditoría de la deuda
El instrumento para realizar esa investigación es la auditoria de la deuda pública, por medio de la cual es posible conocer la naturaleza de la misma, su origen, factores que influenciaron en su crecimiento, quién se benefició del proceso y dónde fueron aplicados los recursos, identificando deudas ilegítimas o ilegales.
La auditoria no es simplemente un ejercicio contable, sino también sirve como proceso de investigación acerca del cumplimiento de normas administrativas y de la legislación vigente, así como de la legitimidad de las operaciones y sus impactos sociales.
Auditoría en Ecuador
La reciente experiencia de auditoría de la deuda de Ecuador reveló la relevancia del instrumento de la auditoria de la deuda. El trabajo fue realizado por la Comisión para la Auditoría Integral del Crédito Público (CAIC), creada por el Presidente Rafael Correa mediante decreto, en el cual definió su composición, atribuciones y objetivos.
"El informe de la CAIC, respaldado en datos y documentos oficiales, posibilitó la acción soberana por parte de Correa, que resultó en la reducción del 70 por ciento de la deuda externa ecuatoriana en títulos, viabilizando un aumento de las inversiones en salud y educación, entre otras inversiones"
El informe de la CAIC, respaldado en datos y documentos oficiales, posibilitó la acción soberana por parte de Correa, que resultó en la reducción del 70 por ciento de la deuda externa ecuatoriana en títulos (Global bonos 2012 y 2030), viabilizando un aumento de las inversiones en salud y educación, entre otras inversiones. Una de las características más importantes de la CAIC fue su composición abierta a la participación de la sociedad civil, lo que garantizó movilización social, seguimiento público y apoyo político a la actitud soberana del Presidente Correa.
También en Brasil, la movilización de las entidades de la sociedad civil alrededor de la cuestión del endeudamiento público resultó en esfuerzos institucionales para la ampliación del conocimiento público de ese proceso. En 2009 y 2010, se ha realizado una Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) de la Deuda Pública en la Camara de Diputados Federales. En esta CPI, de la cuál participó activamente la Auditoria Cidadã da Dívida, se han descubierto mecanismos de ocultación y manipulación de datos sobre la deuda pública.
Maquillaje de la deuda
Un importante instrumento de ocultamiento de la deuda es la continua transformación, por la que pasaron varios países latinoamericanos de su deuda externa en deuda interna. Si antes el gran problema de la deuda se concentraba en las operaciones con otros países o con organismos multilaterales, ahora se debe estar atento a la banca privada y a los mercados financieros, dónde se concentran los principales acreedores.
"Si antes el gran problema de la deuda se concentraba en las operaciones con otros países o con organismos multilaterales, ahora se debe estar atento a la banca privada y a los mercados financieros, dónde se concentran los principales acreedores"
Así, se hace la venta pública de bonos, los que son adquiridos sobretodo por los grandes bancos internacionales y posteriormente negociados en los mercados secundarios, protegidos por un “sigilo” absoluto, el que impide que se sepa exactamente quienes son los acreedores de los países. Además de eso, en estos mercados secundarios, los bonos sufren todo tipo de manipulación, generando ganancias más grandes a los detenedores y prejuicios a las naciones. [...]
Mecanismos perversos
Para operar, el “sistema de la deuda” utiliza el modelo económico, político y financiero de los países, y funciona mediante una red articulada de agentes que buscan garantizar ganancias a los mercados financieros, sometiendo los países a los intereses del sistema financiero privado e imponiendo pérdidas en términos de derechos sociales y humanos a su población. Estos agentes fueron responsables por el alza unilateral de las tasas de interés internacional (a partir de 1979), provocando la crisis financiera de 1982, así como por iniciar y profundizar el proceso que resultó en la actual crisis financiera iniciada en 2008.
"No se puede admitir la utilización del mecanismo del endeudamiento público como algo que no significa beneficio alguno al pueblo y, en verdad, implica la malversación de los recursos públicos y procesos ilegales, ilegítimos y fraudulentos"
Aún así, cuando fueron amenazados por la crisis actual, contaron con la inmediata actuación de los gobiernos, los que efectuaron rápidas operaciones de salvataje bancario, mientras las poblaciones sufrían con los efectos de las medidas de austeridad fiscal.
El “sistema de la deuda” debe ser denunciado, pues es legítimo que los países puedan acceder a créditos financieros, pero no se puede admitir la utilización del mecanismo del endeudamiento público como algo que no significa beneficio alguno al pueblo y, en verdad, implica la malversación de los recursos públicos y procesos ilegales, ilegítimos y fraudulentos.
Enfrentar ese sistema exige un esfuerzo colectivo que involucra a todos los movimientos sociales y ciudadanos desafiados por el poder financiero. Pero esta lucha necesita de una fuerte base empírica, capaz de demostrar la ilegitimidad y la ilegalidad del pago de la deuda, en base a pruebas y documentos. La herramienta hábil para dicha prueba es la auditoría integral de la deuda pública con participación de entidades interesadas, expertos y ciudadanos que den legitimidad al proceso.