Jon Palais: «No es una cuestión moral, una estrategia no violenta es más eficaz»

2025/02/19
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Con la excusa de la presentación del libro "Borroka guztien ama", Jon Palais y Aintzane Orbegozo hablaron ayer, en nuestra sede de Baiona, de las estrategias no violentas que han dado lugar a victorias. Sus testimonios basados en la praxis dieron a entender que la estrategia no violenta es la más eficaz para mejorar la correlación de fuerzas y atraer a más gente a la luchas.

Jon Palais es el autor del libro "Borroka guztien ama" y también es miembro del movimiento Bizi! Centró su discurso en la lucha ecologista. Comenzó diciendo que ya vamos tarde, que no se puede evitar el desastre, pero sí que se pueden suavizar sus efectos. No es lo mismo que la temperatura aumente en 2,5 ºC  o que lo haga en  2,6 ºC. Cada décima es de vital importancia. Basándose en sus vivencias, desgranando varias victorias conseguidas con el movimiento Bizi!, dejó claro que la única forma de ganar la batalla es utilizando una estrategia no violenta. En sus palabras: No se trata de una cuestión moral, sino de resolver cuál es la estrategia más adecuada para mejorar la correlación de fuerzas y atraer a más gente.

Esgrimió tres razones principales para apostar por una estrategia no violenta:
 
1. En el campo de batalla, si hay violencia, ellos son más fuertes. Tienen más armas y recursos. Hay mucha asimetría. Hay que llevar esa asimetría de lucha al terreno que nos es favorable para poder ganar. Fuerza y violencia no son lo mismo. Si has llevado al rival a tirar la toalla significa que en la batalla que has librado,  has sido más fuerte que él.

2. La violencia es muy fácilmente instrumentalizada por el poder. Le da una buena excusa para aumentar la represión y deslegitimar las reivindicaciones. Hoy en día la cuestión del cambio climático no se cuestiona. Se trata más bien de ver quién va a ofrecer una solución que sea creíble para la gente. Cuando utilizamos la violencia, permitimos al poder restar credibilidad a nuestra lucha.Para ganar hay que conseguir mayorías. La lucha que llevamos adelante debe atraer a la gente y la violencia tiene el efecto contrario.

3. La forma de lucha empleada prefigura la sociedad que estamos construyend.  La violencia implica autoritarismo, y también la invisibilización y el  rechazo de aquellos y aquellas que no nos gusten. La lucha sin violencia ayuda a construir una sociedad más pacifista, más democrática, más tolerante, más solidaria.
 
Aintzane Orbegozo (miembro de la dirección de los servicios públicos del sindicato ELA) habló del trabajo organizativo realizado en los servicios de atención domiciliaria de Gipuzkoa, de las luchas y de las victorias logradas. Todo enmarcado en el proceso que ELA está llevando a cabo en la construcción del sindicalismo feminista.

Este servicio de los ayuntamientos guipuzcoanos está subcontratado y las trabajadoras tienen condiciones precarias por el hecho de ser mujeres. Hace 20 años las trabajadoras de Irun fueron las primeras en iniciar la lucha y alcanzar la victoria. Le han seguido otros muchos municipios: Errenteria, Pasaia, Beasain, Tolosa, Zumaia, Hondarribia, Arrasate... Se han logrado más de 20 nuevos convenios, en la mayoría de los casos gracias a la lucha. La mayoría han tenido que llegar a la huelga. Las trabajadoras del sector son conscientes de que para conseguir mejoras es imprescindible la organización colectiva y la disposición a recurrid a la huelga. En algunos casos las mejoras se han conseguido sin huelga, pero incluso en estos casos las trabajadoras estaban organizadas y preparadas para la huelga.

En este sector las trabajadoras están muy dispersas y no se conocen entre ellas. Eso supone, tener que hacer un trabajo impresionante para poder organizarse. La formación es necesaria para abordar la negociación colectiva: la formación feminista es imprescindible para que tomen conciencia del origen de la explotación que sufren. "Vienen unas trabajadoras diciendo: oye, yo no soy feminista, ¿eh? Y luego, cuando están en plena huelga, les ves con el megáfono gritando "¡Viva la lucha feminista!" ".

Aintzane concluyó su intervención elogiando la fuerza que este proceso ha dado a las trabajadoras. "Cuando les preguntas cuál es el principal logro alcanzado en el proceso,  suelen responder 'ganarse el respeto'".